Bienvenidos a esta nueva temporada que llega cargada de
interesantes proyectos.
Para empezar, una velada poética en homenaje a José Manuel
Caballero Bonald. ¡Casi nada! Hablar de la persona de Caballero Bonald, de su
obra y del peso que todo ello tiene en el mundo literario de manera general, y
poético en particular, es una tarea ardua, pero hacerlo de manera breve para
que rápidamente podamos escuchar sus poemas y la música que nos trae Raúl es un
desafío casi titánico. Aun así, lo voy a intentar.
Hablamos de un poeta con 86 años que ha editado entre
poemarios y antologías más de 30 volúmenes, cinco obras narrativas, tres
memorias, tres adaptaciones de teatro clásico, no menos de 20 obras más de
carácter diverso y un sinfín de colaboraciones con revistas y grupos
literarios. Así qué, dejaremos para mejor ocasión la exposición de su obra.
Tampoco resulta fácil enumerar la cantidad de premios y
reconocimientos recibidos a su longeva y prolífica carrera en las letras. Desde
el premio de poesía de Platero allá por 1950, hasta el Cervantes, otorgado el
pasado año, la lista es desorbitada.
Además, toda esa información se puede encontrar a un golpe de
clic en Internet.
Entonces, ustedes se preguntarán qué voy a contar sobre él.
Lo descubrirán ahora mismo.
«Vengo de muchos libros y de muchos
apremios que la imaginación dejó inconclusos (...) Soy esos hombres juntos que
mutuamente se enemistan y ando a tientas buscando el rastro de una historia
donde no comparezco todavía. ¿Seré por fin ese protagonista que desde siempre
ronda entre mis libros y que también está aquí ahora sustituyendo a quien no
sé?»
He escogido estos maravillosos versos de José Manuel
Caballero Bonald, porque creo que de alguna manera nos acercan a la persona y
al poeta que conviven juntos. En ellos se puede apreciar a la persona que duda,
al poeta formado en los libros, y a ambos, persona y poeta, en busca de la
cuidadosa utilización del lenguaje como leitmotiv de toda su obra.
Tradicionalmente,
Caballero Bonald ha sido encuadrado en la generación del 50. La fuerza que las
vivencias cobran en su poesía lo hace ser también uno de los máximos exponentes
de la llamada “Poesía de la Experiencia.
José Manuel Caballero Bonald ha supuesto uno de los mayores
lazos de unión entre Andalucía y América. Gracias a sus letras y al trabajo
realizado a ambos lados del océano, estamos más unidos a nuestros hermanos
latinoamericanos.
Tampoco puedo dejar de mencionar su constante lucha por la
conquista de las libertades cívicas y la injusticia social frente al
franquismo. Como a tantos otros, escritores y no escritores, esta actitud
reivindicativa le llevo a pisar la cárcel. Así pues, no solo homenajeamos al
genial poeta o al polifacético escritor, sino a la persona comprometida con los
más débiles y contra la inmoralidad de las decisiones abusivas.
Podría seguir hablando de la musicalidad en sus letras, de la
originalidad de sus composiciones, de la voluntad por la exactitud en sus estructuras
líricas, por su valentía a la hora de innovar o por los infinitos matices que
hacen único e imperecedero su legado. Pero creo que lo más acertado, es
recomendaros la totalidad de su obra. Para los amantes de la novela, su
narrativa, y para los apasionados por la poesía, sus poemas. Y por supuesto,
escuchar las emotivas palabras de agradecimiento que ha tenido la deferencia de
enviarnos para disfrute de todos los que hoy estamos aquí.
Así que, a pesar de que no esté acompañándonos, pido un
fuerte aplauso para su voz y su alma que sí van a estar presentes con todos
nosotros a lo largo de la noche.
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